Por Beatriz Casalod – Publicada el 14 de Noviembre de 2011 – Nuevas Tecnologías en el arte
Santiago Arranz, uno de nuestros artistas aragoneses más emblemáticos. Ha ido dejando huella en varios edificios y paisajes de Aragón, creando un arte diferente tratando de pintar con su propio lenguaje. Arquitectura, escultura, pintura, nada se le resiste, su arte es adaptable a todo tipo de estilo. Sus obras son inconfundibles, cargadas de una gran simbología. A través de esta entrevista, los usuarios podrán concocer a fondo la carrera artística de Santiago Arranz.
1. Ser artista no es fácil, y mucho menos en una tierra en la que no hay demasiada concepción de cultura y arte. ¿Cómo fueron tus orígenes como artista?
Me preparé para el arte desde la cultura visual como estudiante de Historia del Arte en Barcelona, en un momento en el que todavía no existía en Aragón esta sección. Ser artista no es algo que se decide, y se convierte en algo irremediable si pasada la infancia persiste esa “necesidad” de la creatividad.
Empecé realizando improntas de elementos vegetales sobre objetos que había en mi casa como floreros o jarrones, al mismo tiempo que escribía una poesía muy visual cargada de imágenes evocadoras, en la línea de las letras de Bob Dylan, al que escuchaba constantemente, y que desembocarían en mis primeros dibujos surrealistas de los años 78-79, muy influenciados estilísticamente por el movimiento surrealista y en especial por Salvador Dalí.
2. ¿Cómo surgió ese estilo de símbolos y signos tan notorio en tu obra?
Durante mi estancia en Paris (1989-1995) estuve muy preocupado por las cuestiones de estilo. Quería convertir mi pintura en escritura, encontrar un lenguaje propio. Sabía que sólo con esa herramienta tendría alguna posibilidad de sobrevivir, ya que era, y soy, incapaz de moverme en los parámetros tradicionales. Mi amistad con el crítico de arte y escritor Gérard Georges Lemaire, que entonces dirigía una colección de libros de arte para el editor Henry Veyrier (Paris), va a marcar un antes y un después en mi carrera, cuando en 1990 me encargó la realización de las letras capitulares para el diccionario del surrealismo Le monde du surréalisme, del también escritor Gérard de Cortanze. Aunque ya había aunado forma e idea en mis pinturas más simbolistas de finales de los 80, aún no había sido capaz de hacer desaparecer el espacio tradicional en el que se relacionaban los objetos hasta convertirlo en cartografía, poblando las superficies de escrituras, como resultado de la combinación de estas letras.
Desde entonces todos mis proyectos han partido de una catalogación simbólica del asunto a tratar y he realizado más de diez vocabularios formales diferentes, primero aplicados a la pintura como un sistema de representación: las cúpulas para la nueva sede de urbanismo de Zaragoza en 1992 o el mural de la Casa de los Morlanes en 1995, también en la misma ciudad. Posteriormente tuve la oportunidad de incorporar los vocabularios en el sistema de construcción de algunos edificios como la escuela de restauración Capuchinas en Huesca, 1994 o el Centro de Historia en Zaragoza 1998-2003.
3. ¿En qué tipo de arte se siente más cómodo Santiago Arranz? ¿Arquitectura, escultura o pintura?
En la pintura me implico más emocionalmente que en la escultura, que es más formal o en mis colaboraciones arquitectónicas, donde el consenso y la complicidad con los arquitectos es fundamental. La pintura requiere soledad y concentración pero en contrapartida eres totalmente libre en tus decisiones que solo dependen de ti en la intimidad del taller. La escultura me exige ser preciso con la forma hasta conseguir una eficacia en la comunicación del mensaje, de lo contrario no funciona y, si además está en vía pública, es de una enorme responsabilidad, pues ha de confrontarse con la reacción de la sociedad a la que se le impone la obra, transformando su paisaje cotidiano. Las intervenciones artísticas en la arquitectura pública necesitan de un equilibrado diálogo entre arquitecto y artista. Lo ideal es lograr una perfecta simbiosis hasta hacer desaparecer las fronteras entre las dos disciplinas. Siempre trabajo a partir de mis propias maquetas que realizo en paralelo a la organización espacial proyectada previamente por el arquitecto, incorporando a los espacios un concepto y una iconografía que haga elocuentes los muros convirtiéndolos en espacios culturales per se.
4. De 1986 a 1994, residiste en Francia. ¿Qué supuso esa época para tu obra?
Mi primera estancia en 1986 transcurre en Fontainebleau. El Centro Nacional de Artes Plásticas de Paris me ofreció un taller en el entorno del famoso Château de Fontainebleau y de sus jardines. De mis paseos por el lugar surgiría la serie pictórica Fontainebleau, serie de óleos muy matéricos y coloristas en los que se idealiza hasta la ensoñación el paisaje y la arquitectura del lugar en detrimento de la figura humana hasta entonces omnipresente en mi obra. El segundo periodo francés, entre 1989-1994, como ganador de la primera beca Ramón Acín, transcurre en Paris, a donde me desplazo para estudiar Arte antiguo y clásico en el Museo del Louvre y Arte primitivo en el Museo de Artes Africanas y Oceánicas. Y de este conflicto entre lo preclásico y lo clásico y de mi voluntad permanente por unir ambos conceptos continúa nutriéndose mi obra que en ese período, a finales de los 80, con el uso de los pigmentos en polvo y los pasteles sobre tabla, se hace más austera y concentrada, poblándose de imágenes míticas de otro mundo, como una huida de la realidad. Es el momento de las Ciudades Invisibles, 1990, que convierten la ciudad en un lugar de reflexión sobre la existencia.
5. Desde los años 80, podemos ver exposiciones tuyas tanto individuales como colectivas por todo el mundo. ¿De todas estas exposiciones hay alguna que haya marcado un antes y un después en tu carrera?
La inclusión por parte del comisario de arte Pablo J. Rico para participar en la IV Bienal de Oviedo, en 1984, me sitúa en el mapa del arte español del momento. Años después, la exposición De la vida a la nada en el Castillo de Valderrobres 2005, inauguró un nuevo ciclo en el planteamiento de mis exposiciones que se hacen más complejas y ricas, tanto en el uso de los conceptos como en el de los materiales y técnicas. Esa heterogeneidad prevalece hoy en día.
6. ¿En qué lugar te gustaría exponer, que no lo hayas podido hacer todavía?
Me enfrentaría a cualquier espacio, por complicado que este fuera. Pienso en la sala de turbinas de la Tate Modern en Londres. Hay realmente espacios difíciles de dominar y que suponen un enorme desafío para los artistas. Lo importante es que nunca tenga que enfrentarme a nada para lo que no esté preparado. Sufriría yo y mi obra, si no fuese capaz de adecuar mi poética al espacio. La lonja ha sido una buena experiencia en la que he aprendido algo más, al plantear esta conexión entre la obra y el espacio.
7. En la actualidad podemos ver algunas de tus obras en el Palacio de La Lonja en Zaragoza (España) hasta el 8 de enero de 2012, exposición titulada “Santiago Arranz, una y otra realidad”. ¿Cómo surgió este proyecto?
En 2009-10, acababa de exponer El discurso de lo real en Bogotá y Cali. La idea que animó este proyecto fue trasladar a Colombia algunas de las obras derivadas de realizaciones en espacios públicos, al tiempo que mostraba y daba a conocer estos espacios inmuebles en los que había intervenido ayudado de fotografías. Explicaba entonces que eran trabajos a partir de las ideas y no de los sentimientos. Así que faltaba la parte más visceral e intimista de mi realidad para completar mi autorretrato. Fue así como surgió Una y otra realidad. Santiago Arranz
8. ¿Qué sientes al ver tu obra en algunos de los lugares más emblemáticos de Zaragoza (España)?, como por ejemplo la decoración de la fachada del Edificio Center Plaza de la calle Alfonso, o las esculturas y relieves del Centro de Historia.
Siento un enorme agradecimiento a los arquitectos Antonio Sanmartín, (Capuchinas, Huesca 1994) y J. María Ruiz de Temiño (Centro de Historia y Business Center Plaza 14, Zaragoza 1998-2003 y 2006), respectivamente que me ofrecieron trabajar en sus proyectos, confiando en mis conceptos y en mis vocabularios. La arquitectura me ha convertido en un artista nuevo que ha explorado las posibilidades de su lenguaje en el espacio-tiempo reales, lo que supone un inestimable bagaje para todos los desarrollos actuales de mi trabajo, incluida la pintura.
9. ¿Qué ha supuesto para tu arte la evolución de las Nuevas Tecnologías?
Mi principio de creación es crear sin tecnologías. Quiero tener muy claro que soy yo quien crea y no al contrario. Sin embargo la aplicación de programas como Autocad o corte laser fueron fundamentales para trasladar mis dibujos al hormigón en los enormes desarrollos murales de 5 x 50 m. en el Centro de historia.
10. Día a día van aumentando el número de galerías virtuales. ¿Qué opinas sobre este nuevo concepto?
Prácticamente todas las galerías que existen en alguna parte, también existen en la red, con sus páginas web, etc. y aunque la relación entre el artista y su público a través de una galería o un museo prevalece clásica, la circulación de objetos artísticos y la obra seriada es mas afín a este tipo de presentación virtual. Personalmente prefiero el contacto físico con la obra y el mundo de las relaciones personales que me haga salir del taller.
11. ¿Hasta qué punto crees que la situación económica actual, está afectando al mundo del arte?
Por desgracia el mundo del arte es cobarde cuando las circunstancias económicas son adversas y con la crisis y los recortes se refugia en los valores seguros. La situación todavía se complica más, si los estados no pueden apoyar la creación. En fin… esperemos una pronta normalización de la situación… por el bien de todos!
Beatriz Casalod
La revue Horizons Maghrébins-le droit à la mémoire, a voulu marquer ses 30 ans d’activité éditoriale et artistique en portant un regard artistique sur l’œuvre de Juan Goytisolo. La rédaction a retenu le roman suivant : «Les Vertus de l’Oiseau Solitaire». Elle a sollicité deux grands artistes des deux rives de la Méditerranée : Hassan Bourkia et Santiago Arranz qui ont aussitôt accepté l’invitation. Hassan Bourkia, ami proche et de longue date de Juan Goytisolo, qui fréquente à la fois la personne et son œuvre, a traduit plastiquement ce quel’œuvre lui a inspiré et quant à Santiago Arranz, c’est à l’occasion de son exposition « Vocabulaires du vide» en septembre – octobre 2013 au Centre d’Initiatives Artistiques du Mirail de l’Université Toulouse Jean Jaurès que j’ai eu le plaisir de le rencontrer en compagnie de mon collègue et ami l’artiste Christian Satgé. Lors de notre conversation avec Santiago nous avions évoqué la présence dans ses œuvres de la figure de l’oiseau. Il nous a spontanément signalé que c’était un clin d’œil au roman des Vertus de l’Oiseau Solitaire de l’écrivain espagnol Juan Goytisolo. Santiago, sachant que j’avais une relation de grande proximité avec Juan Goytisolo, a formulé le souhait de le rencontrer. Sur
mes conseils, Santiago a envoyé un dossier artistique à Juan Goytisolo. Sachant que Juan était abondement sollicité de toute part il était plus sage de le rencontrer et de lui présenter notre projet : «Dialogue artistique avec l’œuvre de Juan Goytisolo». Juan m’a reçu en frère chez lui comme d’habitude et a répondu à ma demande dans une forme laconique, mais généreuse :
«Moi, j’ai achevé mon travail, mon œuvre est publique, c’est aux artistes et critiques de réagir en toute liberté, et ton ami Santiago peut venir me rendre visite à Marrakech, il sera le bienvenu».
Chose dite, chose faite : Santiago a rendu visite à Juan Goytisolo. L’amicaleJazouli de la Médina de Marrakech a assuré la résidence sur place de notre artiste espagnol, qui avait souhaité prendre contact et avec Juan Goytisolo et avec l’environnement social ou il
vit depuis 1976 : la ville de Marrakech.
La rédaction est ravie d’ouvrir un dialogue avec ces deux artistes, afin de saisir à travers des mots ce qui a motivé l’acceptation de la proposition de la revue Horizons Maghrébins et le processus de création qui a donné lieu au cahier couleur ci-joint.
Entretien avec l’artiste – peintre marocain Hassan Bourkia
Hassan Bourkia, né en 1956 à El Ksiba (Béni Mellal), il vit et travaille entre Béni Mellal et Marrakech. Il a publié de nombreux articles littéraires et philosophiques dans des revues et journaux marocains et étrangers, et a traduit en arabe Le gai savoir, Par le bien et le mal, Le crépuscule des idoles de Nietzsche; Abner Abou Nour, Le Retour D’abou el Haki, Le Livre de la mère, d Edmond Amran El Maleh; Morceaux de choix, de Mohamed Nedali; Le Fond de la jarre, de Abdellatif Laabi, et avec Mohamed Berrada Du Texte à L’action, de Paul Ricoeur. Il a aussi publié L’empire du doute autour de l’œuvre de Juan Goytisolo (essai); Dounia Hanya (nouvelles); 33 Jours au Liban, Textes d’E. A. El Maleh Oeuvres de H. Bourkia; Le maître de la flamme, en Hommage à E. A. El Maleh… et bien d’autres. Il a exposé au Maroc, en France, au Portugal, en Espagne, en Suisse, en Angleterre, au Burkina Faso, aux Iles Canaris, en Algérie, en Syrie, en Jordanie, au Koweit, au Qatar, aux Etats Unis, au Brésil, au Mexique, en Egypte, en Iran… et autres.
Mohammed Habib Samrakandi : Hassan Bourkia, je sais tout votre attachement et votre grande amitié pour le couple Marie-Cécile Dufour El Maleh et Edmond Amran El Maleh. En revanche, j’ignore dans quelles circonstances vous avez noué une amitié avec l’écrivain espagnol Juan Goytisolo ?
Hassan Bourkia : C’est à l’ombre de l’amitié de l’écrivain Edmond Amran El Maleh et de sa femme, la philosophe Marie-Cécile Dufour El Maleh, que j’ai fait la connaissance de Juan Goytisolo. Ça remonte aux années 90, ou un peu avant, lors d’un colloque organisé par la revue Horizons Maghrébins et l’Amicale Jazouli à Marrakech. Notre ami Edmond m’avait transmis l’invitation de Juan à déjeuner chez lui. A l’époque je connaissais quelques oeuvres de Juan et ses positions politiques en liaison avec le monde arabo-musulman. Je me souviens que ce n’était pas facile pour moi de penser que j’allais manger chez Juan, en sa présence et sous son regard, en compagnie de deux autres monuments de la littérature et de la pensée philosophique : Edmond et Marie-Cécile. D’autant plus qu’alors Juan Goytisolo était une génération à lui seul, une voix inimitable, unique, qui appartient à notre époque et qui en même temps la déborde. Et c’est là où tout a changé pour moi. Il venait à Béni Mellal et je passais, comme je passe aujourd’hui, le voir, seul ou avec des amis, manger chez lui ou au café de France et parler de quelques récentes questions.
Mohammed Habib Samrakandi : Juan Goytisolo effectivement aime beaucoup venir vous rendre visite à Béni-Mellal. Qu’est-ce qu’il apprécie dans cette ville, oubliée par les pouvoirs publics et souvent par ses propres fils ? Est-ce que c’est votre compagnie qui motive ses déplacements ou ses pérégrinations au bord des ruisseaux qui jaillissent de la source ‘Aine Asserdoune, de la belle région ou tout simplement le regard des gens modestes de cette ville ?
Hassan Bourkia : D’abord il y a l’amitié. Juan aimait rendre visite à ses amis de Béni-Mellal. Il téléphonait pour annoncer sa visite et réserver une chambre. Il m’honorait de sa confiance. Il aimait rester à son hôtel habituel, en face des cimes du Moyen Atlas dans le calme de la nature, toujours vêtu dans sa manière, simple, une gamme de vert, tel les mystiques, qui unit l’être et l’univers. Sa simplicité est une chose étonnante. Il ne parlait jamais de ses romans, et n’aimait pas les compliments, toujours pris par ce qui se passait dans le monde d’une manière très engagée. A l’heure du déjeuner, il acceptait sans difficulté la proposition d’aller manger au parc de ‘Aine Asserdoune. Et sur un vieux drap (une cachcha) jeté à même le sol, on se mettait tous (quatre ou cinq personnes) autour d’un tagine sobrement préparé. Je le voyais heureux, d’une simplicité souriante. Il se détendait avec ses amis, oubliait sa rigueur et parlait peu sauf quand il voulait donner son opinion d’ordre politique ou littéraire. Et c’est là que j’ai commencé à connaître son arbre généalogique littéraire. C’est à travers lui, et je l’assure de tous mes remerciements, que j’ai mis le premier pas dans le champ des lettres où je suis maintenant. Sans oublier, bien entendu, l’influence des deux écrivains marocains amis : Edmond Amran El Maleh et Mohamed Berrada dans ce devenir.
Mohamed Habib Samrakandi : Revenons à votre travail proprement dit sur l’œuvre des Vertus de l’Oiseau Solitaire. Comment avez-vous procédé pour traduire plastiquement votre compréhension des personnages et du caractère intertextuel de ce roman ?
Hassan Bourkia : «Les vertus de l’oiseau solitaire» est un texte qui superpose les temps et les espaces narratifs et qui transmue les identités des personnages. Juan y rend hommage à l’art de Saint Jean de La Croix aussi incompris dans les lettres espagnoles, comme Gongora, l’Archipel de Hita, Delicado, Cervantès, Sterne, Jean Ruiz et autres. C’est «un réseau», disait Juan, tramé d’affinités et d’attachements qui alimentait ma voracité créatrice et m’incitait à creuser le sous-sol où prend racine l’arbre prodigieux et à pénétrer, quand le texte même l’exigeait, dans le domaine des différentes cultures qui le nourrissent» (Plante du désert, Horizons Maghrébins, n°28-29,1995, p.12). La relecture du texte m’a permis aussi de moduler les différents registres esthétiques, comme les différents registres vocaux dans la trame de Juan Goytisolo, de parodier aussi les symboles et les connotations entre la terre de Tolède, de Marrakech, les talismans africains, la couture des sorciers africains ou chamans, l’encre du jus des grenades (cité dans Les Vertus de l’oiseau solitaire) et quelques bribes de poèmes d’Ibn ‘Arabî et de notre ami José Angel Valente sur des fonds publicitaires en papier kraft, ironiquement choisis, ou nus d’histoire et de langage. Quarante pièces pour chacun des artistes font référence au Barzakh (ou La Quarantaine) l’autre roman de Goytisolo. Sans titres pour ma part, parce que les chapitres de cette oeuvre restent sans titres, des paragraphes sans ponctuation. Les paragraphes et les voix se mélangent tels les conteurs et le Moi. Il ne s’agit ni d’un poème ni d’un roman et il n’a pas, pratiquement pas, de Sens ou de fil d’Ariane comme le veut la tradition romanesque ! J’ai essayé d’opérer le «montage» du texte au sens cinématographique, d’un matériau de pensées, d’images, de séquences, accueillies dans l’ordre même de leur apparition. «Sans titres» aussi, parce que ni le texte ni les papiers ne racontent des histoires quelconques, ou ne développent des idées comme dans les récits et la peinture classiques mais donnent forme par le langage et la matière aux forces qui nous traversent et créent une autre écriture et une autre peinture. Le langage y est pris d’une véritable transe. A ce niveau donc la notion du genre perd son sens. Il y a là un certain passage aller-retour des formes limitées, à une ouverture illimitée suggérée ici dans l’isolé et l’inabordable. D’où cette complexité plus abondante et sensuelle qu’intellectuelle qui est celle de la vie, que j’ai essayé de traduire dans mon œuvre à travers la matière et la terre seules capables de la faire rejaillir.
Mohammed Habib Samrakandi: Le style technique adopté qui vous singularise est mobilisé pour la création de cette série d’œuvres. Quels destins donnez-vous à ce dialogue inédit avec l’œuvre de votre ami Juan Goytisolo, en compagnie d’un autre artiste espagnol, d’autant plus que ces oeuvres seront découvertes au Maroc, en Espagne et enfin à Toulouse en octobre 2015 ?
Hassan Bourkia: C’était une passionnante aventure, non sans lourde responsabilité, de travailler sur cette œuvre de notre ami Juan Goytisolo, qui sort des canons littéraires dominants, et qui couvre toute une histoire de différentes cultures qui se nourrissent entre elles. Elle ressemble – dans la belle traduction d’Aline Schulman – à l’oiseau «éthéré, incolore, extatique qui symbolise l’âme détachée de ce monde dans les visions et ravissements du saint. Il prend son vol sans cesser d’être immobile, il voyage sans parcourir la moindre distance, il approche sans parcourir aucun espace, toutes les couleurs émanent de lui mais il n’a pas de couleur. Il a son nid en orient sans que sa place en occident reste vide» (Les vertus de l’oiseau solitaire p.186). J’ai essayé donc de «recouvrir» les pages du livre qui était enfin composé (pour reprendre la dernière ligne de cette œuvre) et essayer de m’envoler avec mes amis Juan et Santiago, comme dans l’Assemblée des oiseaux, et recomposer ce roman – poème et adapter mes oreilles à son écoute en expérimentant d’autres outils que le langage et en essayant de trouver quelques repères qui puissent guider ma relecture (ou plutôt notre relecture) et j’ai constaté que l’œuvre parle des feuilles, des fragments, des encres, des couleurs (p.122,123), de l’expérience mystique sobre (p.127,128,133,134), des papiers palimpsestes (p.137) et pour me mettre dans l’esprit de cette vision, il a fallu que mon travail soit simple et complexe à la fois, que les traces et les fragments de papiers transmettent une image du temps, des restes entre l’effacement et la décomposition, des reliefs qui ressemblent aux palimpsestes, papiers (traces) qui font face au pouvoir destructeur du temps. Car la trace doit être ici un compagnon pour reconstruire et recomposer ce qui s’est estompé. La marque matérielle qu’on voit sur les papiers et qui est en voie de s’effacer, désigne, quant à elle, plus une absence qu’une trace de l’absence de la chose ou de l’être aimé dont on s’impatiente du retour et l’écriture qu’on peut voir là, et qui ressemble à la géométrie, elle exprime la volonté et le désir de transcrire le mouvement de la parole: la trace de l’écriture, abandonnée à la surface des papiers kraft délaissés, dit, en un sens le vœu de résister aux amputations de la mémoire. L’après – ou les destins – serait alors dans les germes de cette vision qui se nourrit de différentes cultures et qu’on peut trouver la meilleure définition de la création et du créateur au milieu de cette stérilité culturelle et morale dans ce monde qui tourne clairement le dos aux valeurs littéraires, politiques et morales que les Voix de «Les vertus de l’oiseau solitaire» défendent et défonderont, en attendant. Et je pense que des noyaux tels Horizons Maghrébins, CIAM et l’Institut Cervantès constituent déjà, avec leurs slogans culturels, la diffusion de pareils messages. Je souhaite que le périple de cette exposition invitera aussi les gens à entrer dans ce livre comme dans un rêve ou dans les labyrinthes d’une Medina, sans guides ni cartes, à le relire et recevoir ces oeuvres comme un texte ouvert au cheminement intérieur.
Entretien avec Santiago Arranz
Santiago Arranz est un artiste espagnol, peintre et sculpteur, né à Sabiñánigo (Huesca) en 1959. Diplômé en Histoire de l´art à l’Université de Barcelone en 1982, il a vécu à Paris de 1986 à 1994. Depuis 1990, année de la création de son « Abécedaire »- qui fut exposé dans «Pintar Palabras», 2003, exposition présentée par l´Institut Cervantès à Berlin et New York – il conçoit tous ses projets à partir de ces iconographies, qui confèrent un langage très personnel à son oeuvre, toujours en rapport très étroit avec la littérature, l´architecture et les espaces publics. Consulter: www.santiagoarranz.com
Habib Mohammed Samrakandi: Santiago Arranz, en tant qu’artiste espagnol, j’aimerais bien que vous rappeliez au lecteur de notre revue, comment et dans quelles circonstances vous avez découvert l’œuvre de Juan Goytisolo et en particulier «Les Vertus de l’oiseau solitaire «?
Santiago Arranz : J´ai oublié beaucoup de choses de cette période de ma vie… mais à l´âge de 10 ou 11 ans, j´ai vu à la maison un livre de Juan Goytisolo «Juegos de manos» (Jeux de mains) que mon oncle avait amené, et j´ai été, inconsciemment attiré par le dessin des ombres noires de la couverture du livre édité en 1969 par les Ediciones Destino. Je me souviens d’une réflexion passionnée entre mon frère ainé et mon oncle à propos de ce livre : « C´est toujours très intéressant ce qu´il écrit…. », puis les années sont passées… car pour lire Juan Goytisolo, il faut vivre et se former avant. Je l’ai relu récemment et j’ai redécouvert son immense œuvre littéraire et je comprends mieux maintenant l’importance que l´auteur accorde à la relecture. Pour Les Vertus de l´Oiseau Solitaire, c´est à nouveau le caractère iconographique de son œuvre qui me fait plonger dans sa lecture grâce dans un premier temps, aux illustrations que Frédéric Amat avait faites pour ce roman-poème édité en Espagne par Galaxia Gutenberg en 2007, bien plus tard que sa première parution en 1988, et dans un deuxième temps à l’écoute de l´opéra «Le voyage à Simorgh», inspiré des Vertus de l´oiseau solitaire, que le compositeur musical Sanchez Verdu a mis en scène avec Frédéric Amat, pour le Théâtre Réal à Madrid en 2007. Ce livre me paraît tellement d’actualité que l’on peut le lire à toute époque, comme d’ailleurs, la plus part des œuvres de Juan.
Mohammed Habib Samrakandi : Cette précision étant faite, parlez-nous de la manière dont vous avez abordé votre travail de création. Autrement dit, comment êtes-vous passés d’une lecture méditative du roman de Juan Goytisolo à sa transposition dans une série d’œuvres plastiques ?
Santiago Arranz: Vous avez bien joué votre rôle de directeur d´Horizons Maghrébins, en invitant deux artistes en même temps, de pays et cultures différentes pour aborder le même sujet. Avant de m’enfermer dans mon atelier, j´ai voulu rencontrer l´écrivain Juan Goytisolo, et le peintre Hassan Bourkia, c´est pour cela que je me suis rendu dès que possible à Marrakech, afin de fixer un point de départ commun entre mon collègue Hassan Bourkia et moi-même, dans un esprit de dialogue qui convergerait vers l´unité. Un des principaux concepts a été la contamination des idées dans le sens de je suis l´autre et l´autre est moi. Penser nos œuvres, celles de Hassan et les miennes dans le même espace comme pour mieux détruire l´égo, et affirmer l’idée centrale, de se retrouver à soi- même dans l´autre en mettant en place le même dispositif créatif que Juan Goytisolo avait utilisé dans Les Vertus de l’Oiseau Solitaire, en dialoguant avec l’œuvre de Saint Jean de la Croix. Deux jours après notre premier rendez-vous à Marrakech, j´ai pu discuter à nouveau des Vertus de l’Oiseau Solitaire avec Juan Goytisolo, au Café de France, place Jamaa el Fna, où il m´a donné une nouvelle clé pour la lecture de son livre: « le lire comme un poème en haute voix ». Puis avec Hassan Bourkia nous nous sommes vite mis d’accord sur les aspects physiques et conceptuels de cette exposition. En hommage à Juan Goytisolo, Hassan a proposé immédiatement de travailler sur l´idée et la symbolique de la quarantaine (en référence au livre de Juan La cuarentena, 1991), nous avons décidé alors que nous réaliserons chacun 20 œuvres, en utilisant comme support le papier kraft, coupé au format 40 x 40 cm. Pour passer de la lecture méditative de votre question à une lecture symbolique de la quarantaine et à la transformation de cette lecture en œuvres artistiques, je suis parti de l´image polysémique et ambigüe de l´oiseau, qui appartient à la cosmique sanjuanista et soufi et je me suis fabriqué un modèle iconographique : l´image d´un oiseau dédoublé où deux oiseaux semblent fondus en un seul, comme dans les couples amoureux, cette allégorie va très bien avec le vers «la amada en el amado tranformada!» (l’aimée dans l’aimé transformé !) appartenant au poème «Nuit obscure de l´âme» de Saint Jean de la Croix. Cette forme à double oiseau se répète dans toute la série, comme une modulation, d´une même présence, en habitant l´intérieur de chaque dessin d´une allégorie différente, ce qui m´a permis de survoler le livre en créant un nouveau regard à partir d´une lecture métamorphosée en images poétiques, où je décline tous les oiseaux solitaires maudits et contaminés, à la fois par des maladies contagieuses, et par des idées toxiques.
Mohammed Habib Samrakandi: Vos 20 œuvres portent des titres. Ceux-ci sont de courtes phrases tirées des Vertus de l’oiseau solitaire. Ma question est de savoir comment le processus de création a fonctionné ? Qui est conditionné par l’autre : le titre ou l’œuvre une fois réalisée ?
Santiago Arranz: Pendant la lecture du roman je prenais des notes ou je faisais des esquisses dans les marges du livre. Une fois le livre lu et relu, je l’ai déconstruit et j’ai analysé sa structure. J’ai trouvé 53 scénarios différents, avec des correspondances entre eux, puis j’ai construit un story-board comme pour un film, ce qui m’a permis d’avoir un parcours visuel des Vertus de l’Oiseau Solitaire. Étant donné l´écriture kaléidoscopique et très riche de Juan Goytisolo, certaines scènes ont plusieurs possibilités visuelles, par exemple quand il aborde le VIH, la bibliothèque interdite, Saint Jean de la Croix ou la Yagli güres turque,… Quand le travail plastique commence je n´ai autre chose sur mon papier vert pâle que le symbole des oiseaux, à l´intérieur duquel j’enferme les histoires qui ne sont jamais définitives malgré les références graphiques, et parfois au dernier moment je me libère des notes et des esquisses, pour expérimenter la lecture en tant qu´aventure spirituelle. Une fois les œuvres terminées, je cherche dans le livre les titres qui leurs conviennent comme une œuvre autonome qu´on pourrait intercaler dans plusieurs moments de la narration. Par exemple, quand j´ai fait le premier dessin intitulé Lotus du terminus, le choix du titre s’est imposé à moi comme une évidence. Quand je travaillais à partir de l´oiseau qui se contamine, en se cherchant l´un à l´autre, comme dans le vers de Saint Jean de la Croix, j’ai complété cet œuvre, ce dessin en ajoutant une fleur de lys, que j´avais rapporté du jardin Majorelle à Marrakech, c´est ainsi que je relie par cette acte, ce dessin à la question de la mort quand Juan nous pose la question de savoir si «on est arrivé au lotus du terminus et ses douces rivières» et c´est de ce mélange entre réflexion et poésie, entre littérature et realité, que va naître toute la série.
Mohammed Habib Samrakandi: Premièrement, pouvez-vous expliquer la raison des techniques plastiques que vous avez utilisés, ainsi que le choix des couleurs et du support léger, fragile correspondant à la fragilité des oiseaux et des âmes comme un renvoi symbolique aux deux figures spirituelles de l’Espagne d’Ibn ‘Arabi et de Saint Jean de La Croix ? Deuxièmement, quelles sont vos attentes sur le plan pédagogique, à travers cet échange inédit avec l’œuvre de Juan Goytisolo ? Je pense particulièrement à cette possibilité offerte par les Instituts Cervantès et le CIAM de l’Université de Toulouse Jean Jaurès pour promouvoir vos œuvres.
Santiago Arranz: En effet, pauvreté et légèreté définissent toute la série en 20 dessins de mes travaux, tirés de la lecture des Vertus de l’Oiseau Solitaire de Juan Goytisolo, dans ce voyage iconographique de l´âme, où sont évacués et mis en quarantaine tous les hétérodoxes. Toutes les œuvres sont différentes techniquement. En m’appuyant sur l´inspiration et le plaisir, j´ai voulu m´échapper de l´objet artistique, aseptique et commercial pour me concentrer sur les aspects culturels d´un projet artistique – littéraire, pour moi d’une grande importance spirituelle. J’ai choisi la sobriété des moyens plastiques, en commençant par l’utilisation d’un papier d’emballage patinée par l’érosion du temps comme support que j´ai préparé spontanément avec une couleur verte voulue apaisante, tandis que les techniques utilisées, sont extrêmement modestes et sans aucune signification culturelle, se réduisant pratiquement au crayon et à l´aquarelle, avec l’utilisation sporadique de fils à coudre, de fleurs, de pailles, de pigments, de textes découpés, de cartons industriels, de tiges de papier ou de végétaux. J´ai toujours constaté dans les projets artistiques-littéraires que la littérature en ouvrant la liberté et l´originalité de la poésie, amplifiait les possibilités de l´image réelle du monde, la même dont jouissent les oiseaux solitaires qui vivent par dessus des choses transitoires, dans le silence et la solitude de la contemplation. Et si, comme affirme notre écrivain «…une culture c´est l´addition de toutes les influences qu´elle a reçues…», la mienne s’est notamment enrichie après auprès de l’œuvre de Juan Goytisolo. La force de sa littérature, est constatée par une réalité qui lui donne raison. Lire ses livres d´une période précise et les expérimenter dans une autre, c´est comme lire le journal du jour, le journal de toujours, mais en nous échappant de la réalité à travers la littérature et la poésie. Mon souhait serait que cette exposition, hommage à Juan Goytisolo, soit une fête où la littérature et l´art s´unissent, en ouvrant pour le visuel la porte à une littérature si nécessaire dans nos jours.
Echanges France-Espagne-Maroc conduits en janvier 2015
trinidad@santiagoarranz.com
© All Rights Reserved 2022